Argentina venció a Brasil e Italia a Inglaterra para alcanzar la gloria máxima.

Continúan los festejos luego del “Maracanazo” que protagonizó la selección argentina de fútbol de la mano de Lionel Messi y el memorable gol de Ángel “fideo” Di María el pasado sábado por la noche.

La Argentina venció 1 a 0 a Brasil en la final y se consagró campeón de la Copa América luego de muchos años en que los títulos se le venían negando pese a contar en reiteradas ocasiones con el plantel de fútbol más competitivo y más caro del mundo entero. La última gran espina fue el mundial del 2014 en que la selección albiceleste perdió en el último partido quedando privado de la copa del mundo.

Pero el pasado sábado por la noche todo fue una fiesta. Hubo que sufrir hasta el final para ver a los jugadores argentinos descargando toda su euforia con el pitazo final del árbitro uruguayo. A partir de allí todo fue una fiesta: en la cancha, en el vestuario, en los alrededores y, por supuesto, en las principales ciudades del país.

Apenas algunas horas después, otra gran final se desarrollaba en otro continente, el europeo. Se trataba ni más ni menos que del partido que definiría al campeón de la Copa Europa entre dos de los equipos más poderosos del mundo: Italia e Inglaterra.

Pese a que los británicos rápidamente se pusieron en ventaja, el partido finalizó empatado y debió esperarse hasta los penales para ver al campeón: Italia.

Rápidamente las redes explotaron relacionando inevitablemente los históricos triunfos con el máximo ídolo de la Argentina y quizás del mundo: Diego Armando Maradona. El diez no solo fue campeón del mundo con la selección albiceleste sino que dejó además un enorme recuerdo y cariño en Italia, fundamentalmente por su glorioso paso por el Nápoles.

Milagro o no, el Diego estuvo presente en los festejos argentinos e italianos. Fiesta maradoniana total.