En pocas semanas los jujeños deberán concurrir a las urnas en medio de la segunda ola.
Hace unos días se conoció la decisión del gobernador de la vecina provincia de Salta, Gustavo Sáenz, de postergar la fecha de la realización de las elecciones legislativas locales con motivo del incremento de contagios por coronavirus en muchas de las principales ciudades salteñas.
El criterio aunque lógico, no es compartido sin embargo por su par de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales, quien decide hacer la vista gorda al aumento de ocupación de las camas de terapia intensiva no solo en el interior provincial sino en la ciudad capital y seguir adelante con el adelantamiento de los comicios.
El Hospital San Roque, principal centro de derivación de casos de Covid-19, padece una preocupante situación. Allí, el porcentaje de ocupación superaría el 90% de su disponibilidad con lo cual, de solo mantenerse el número de casos actuales, podría ocurrir una eventual saturación del sistema de salud.
La campaña y la rosca política, con el principal responsable del COE como cabeza de lista del oficialismo, marginaron a un segundo plano el tema sanitario.
