Durante el fin de semana pasado hubo una marcha del kirchnerismo pidiendo por la libertad de Sala.
La líder de la organización social Tupac Amaru, Milagro Sala, se encuentra afrontando una infinidad de procesos judiciales desde la llegada de Gerardo Morales al gobierno de la provincia de Jujuy.
Sala fue detenida inicialmente por un acampe en la Plaza Belgrano de la ciudad capital a pocos días de haber asumido Morales la gobernación. Desde ese mismo momento, el sector más duro del kirchnerismo empezó a denunciar a nivel nacional un ensañamiento con la dirigente a quien consideran presa política.
Por aquel entonces, el propio presidente de la Argentina, Mauricio Macri, avaló en más de una ocasión el manejo de su socio político Morales en relación a las denuncias públicas lanzadas sobre la Tupac Amaru e incluso sobre miembros del anterior gobierno de Eduardo Fellner.
Con la llegada al poder de un nuevo gobierno peronista en 2019, los allegados a Milagro Sala se entusiasmaron con un posible indulto presidencial.
Lo cierto es que fue el mismo Alberto Fernández quien rechazó a viva voz esta posibilidad. El actual mandatario nacional cree que muchos de los procesos judiciales iniciados durante el macrismo deben ser revisados por adolecer de vicios insanables, sin embargo descarta de lleno un indulto.
La marcha por los cinco años de detención de Sala convocada por el ala dura del kirchnerismo fue acompañada por funcionarios nacionales más ligados a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Desde el albertismo evitaron pronunciarse al respecto.