amila fue víctima de un violento robo por parte de un vecino suyo, alguien que vive a la vuelta de su casa, en Lomas del Mirador. El hombre la apuñaló y ella, que desde los 8 años hace artes marciales, decidió ir a buscarlo. “Lo quería agarrar y lo quería encontrar porque si no hacía justicia yo, nadie lo iba a poder hacer. Me pasó a mí que me puedo defender, pero a una persona mayor, si le pasa, la mata. En eso pensaba”.
Tal como relata la víctima a Telefe, ella se entrenó para no vivir con miedo. Aquel día, estaba sentada en la puerta de su casa con el celular cuando un delincuente apareció y la agredió. “Sin mediar palabra, me empieza a tirar con el cuchillo acá arriba”, cuenta Camila, mientras con la mano señala que el hombre la atacó cerca del cuello.
“Yo me defendí y ahí es el momento en que me dice: ‘Dame el celular'”, recuerda esta joven de 20 años que se negó a dárselo y se lo guardó. “Le pateé el cuchillo, pero lo volvió a agarrar y me lo clavó en la pierna”. El ladrón la apuñaló en la pierna izquierda con un cuchillo Tramontina. “La médica me dijo que es un milagro que no me haya tocado nada, pasó entre medio de todo lo que me podría haber hecho mal”.
Más allá de la herida, Camila lo fue a buscar. “Como me estaba defendiendo con una sola mano, dije: ‘Se lo doy y lo corro de atrás'”. Según cuenta, esa reacción “le salió de adentro”. “No lo pensé ni lo dudé. Dije: ‘Lo voy a correr hasta donde vaya y lo voy a perseguir hasta que lo encuentre'”.
Las cámaras de la calle registraron la escena: Camila comenzó a perseguirlo, el hombre trastabilló y siguió. En ese momento, ella -que nunca había visto a su agresor antes- descubrió que él vivía a la vuelta de su casa. Pateó la puerta de la casa e ingresó. Ahí se encontró con una mujer llorando, que no sabe si es la abuela o la madre del hombre. “Me decía que no lo haga más, que no le patee más la puerta, que eran personas enfermas y me iban a devolver todo lo que él me robo. A esa persona ya no la vi porque estaba escondida”. Finalmente, lo devolvieron el teléfono: “Fueron, me buscaron el celular y me lo devolvieron, lleno de sangre y todo roto”.
Ella nunca había visto a este agresor, que quedó internado en un neuropsiquiátrico por orden de la Justicia. “Jamás lo vi en el barrio, los vecinos dicen que es nuevo”, cuenta la joven. Y añade que no fue la primera vez que ese delincuente intentó robar en el Lomas del Mirador: “No sé si a otros les pasó tan violento como a mí, pero a una vecina la acorraló para pedirle plata y a otro lo corrió con el cuchillo. Supuestamente, todos los días a las 6 de la tarde salía, seguía a las chicas y dos o tres cuadras después les robaba.