La provincia de Jujuy cuenta entre las pérdidas por la enfermedad más de 600 jujeños y jujeñas

Durante estos días la gestión del gobierno, encabezada por el propio gobernador Gerardo Morales, intentó copar la agenda mediática con temas que nada tuvieran que ver con la pandemia provocada del coronavirus y mostrar a Jujuy como una provincia estabilizada sanitariamente.

Sin embargo, si bien los casos positivos registrados en los testeos parecen haber frenado la preocupante curva de ascenso, los decesos por la enfermedad siguen registrándose a diario. Ayer se conoció la triste noticia del fallecimiento, por coronavirus, del reconocido dirigente radical Miguel Ángel Giubergia. Fue apenas una de las 10 muertes notificadas.

Con la decena de fallecimientos de ayer (se informaron cinco hombres y cinco mujeres), la provincia de Jujuy cuenta entre las pérdidas por la enfermedad más de 600 jujeños y jujeñas. Un número extremadamente alto en comparación con otras jurisdicciones provinciales del país.

Los más de 16.500 contagios sufridos desde el inicio de la pandemia dan cuenta de una mala gestión sanitaria local.

Pese a que el oficialismo intenta mostrar como superada la crisis del sistema de salud, los enfermeros y trabajadores de los hospitales salen a pedir desesperadamente a la población que no se relaje y sigan cumpliendo estrictamente las medidas básicas de cuidado.