Exigen una rápida intervención de las autoridades del Ministerio de Educación de la provincia.

Docentes, padres de alumnos, familiares y miembros de la comunidad educativa provincial realizaron una nueva protesta, esta vez mediante la modalidad de un bocinazo, para exponer la crítica situación que los atraviesa.

La principal destinataria de los reclamos es la ministra Isolda Calsina a quienes los profesionales de la educación acusan de no estar a la altura de las circunstancias para dar respuestas que desde el sector consideran elementales.

Los reclamos tienen como objeto la asistencia en temas tales como el aumento salarial, bonos por productividad, asistencia para afrontar la virtualidad y suspensión de clases o reducción de jornadas, entre otros.

Los docentes jujeños están atravesando un fuerte estrés. A los bajos salarios que reciben en la actualidad, se le suman además el alto estrés psicológico en momentos en que la provincia de Jujuy atraviesa el peor momento desde el inicio de la pandemia mundial del coronavirus. Muchos docentes y sus familiares están contagiados por COVID-19.

Exigen a las autoridades gubernamentales rever la modalidad virtual en curso puesto que muchos de sus alumnos no tienen acceso a una computadora o a conexión a internet. Es por esto que se evidencia en la provincia una muy alta tasa de deserción escolar que amerita una rápida intervención de los funcionarios.

Las protestas de los responsables de la educación se vienen replicando en muchas de las localidades de la provincia. Sin embargo, hasta el momento no hubieron respuestas de la ministra Calsina ni de sus colaboradores.