¿Por qué un día 29 de abril?

Si bien suele asociarse la celebración del Día del Animal con la muerte del activista y fundador de la Sociedad Argentina Protectora de Animales, Ignacio Albarracín, el 29 de abril de 1926, lo cierto es que este dato no deja de ser producto de la mera casualidad y quizás con el destino mismo que la vida le tenía preparado a este luchador. La fecha del 29 estaba prevista mucho antes de que falleciera Albarracín.

Ya en 1908, 18 años antes del deceso del activista, el propio Albarracín y el director de un zoológico, Clemente Onelli, habían pautado la fecha para celebrar y concientizar sobre la protección de los animales. Sin embargo, esa primera celebración tuvo que suspenderse por una intensa lluvia que obligó a postergar el festejo para realizarse finalmente el día 2 de mayo.

Esa mañana de inicios de mayo, Onelli puso a disposición el zoológico y allí se congregaron miles de personas incluido el entonces presidente de la República Argentina, Figueroa Alcorta que asistió con sus funcionarios y unos quince mil escolares, la gran apuesta de Albarracín que pretendía generar conciencia en los más chicos sobre el daño que causa en los animales el destrato humano.

Ignacio Albarracín fue un abogado jurisconsulto que durante su actividad se desempeñó primeramente como secretario y luego como presidente de la Sociedad Argentina Protectora de Animales, la cual fundó en 1898 junto a Sarmiento, Mitre, el reverendo J. F. Thomson, Guido y Spano y V. F. López. Desde allí realizó campañas contra las riñas de gallos, las corridas de toros y el tiro a la paloma entre otros.

Sin dudas, por su lucha. el hito que más marcó a Albarracín fue el haber sido uno de los propulsores de la Ley Nacional de Protección de Animales, promulgada el 25 de julio de 1891.